Ícaro Memorias 2022 Proyectivo C

Santiago
Lara Díaz

Santiago Lara Díaz
21 de noviembre de 2022
Foto: Sebastián Zamudio


Compartir en:

Cuando pienso en ello, no puedo creer que me esté graduando del Merani, y por mucho que tengo las señales o entiendo las implicaciones que tiene estar a un mes de acabar el colegio todavía no me entra en la cabeza el hecho de tener que irme. Creo que mucho de eso se debe a que cuando pensaba en Proyectivo C o en graduarme siempre era un tipo de idilio, algo que seguro yo anhelaba, pero que realmente no veía cerca o realizable. Ahora que me veo escribiendo este texto es como si de una u otra manera tuviera que aceptar el hecho de irme y, aun así, todavía lo siento irreal.

También siento mucha incertidumbre acerca de irme del colegio y de dejar la estabilidad que me da el Merani. Por ejemplo, es extraño pensar en todas las personas, cosas y hábitos que me han acompañado a lo largo de mi vida y que dentro de muy poco van a dejar de ser. También me da miedo el hecho de que no puedo pensar en un momento de mi vida en el que haya sido más feliz de lo que soy actualmente y no sé si seré capaz de sentirlo en un futuro próximo.

Sin embargo, creo que por lo anterior también me queda muchísimo que agradecerle al colegio y a todas las personas que me guiaron y me acompañaron en el trayecto (no siempre fácil) de llegar hasta C. De los profes, quisiera agradecerle a Melissa, por guiarme en el colegio y motivarme y por haber sido la razón de sentirme tan seguro y tranquilo en las ciencias sociales, a Cediel, por permitirme abrirme con alguien y sentir que dentro del colegio alguien se preocupaba por cómo estaba, además de tener siempre el mejor consejo posible, y también dar las gracias a Henry, porque aunque fue poco tiempo el que realmente nos conocimos me ayudó mucho a sentirme capaz de lo que puedo llegar a ser y a reconocer mi potencial.

A mis compañeros, comienzo agradeciéndole a Torres. Gracias por ser una parte fundamental ahora en mi vida, por enseñarme tantas cosas, por hablar conmigo y trasnocharnos aunque no hiciéramos mucho, por escucharme y entenderme, por mostrarme música, por hacerme interesar en nuevas cosas y hacerme querer ser mejor, por alegrarme la vida, por ser incondicional y por acompañarme siempre. A Sofía, porque me has hecho sentir vivo de una manera que fácilmente no puedo explicar, por permitirme ser yo siempre y por enseñarme a quererme de alguna manera como te amo a ti. A Morris, por acercarse a mí cuando menos lo esperé, pero cuando más lo necesité, por hacerme reír con cualquier chiste y siempre preocuparse por mí. Y también a Francisco, por ser el hombro en el que me apoyé durante tanto tiempo, por siempre estar presente y por siempre soñar conmigo.



Portada

También, por último, quisiera dar las gracias a mi abuelito: aunque ya no estás conmigo, me encantaría poder compartir este momento contigo. Espero que, así como hoy me siento orgulloso de ti, puedas sentirte orgulloso de en quien me convierto más adelante. Te quiero con todo mi corazón.

Las personas que mencioné aquí, y también todas las que conocí en mi paso por el Instituto, son la razón de que me sienta emocionado de graduarme y es porque sé que, aunque mi vida vaya a cambiar, muy probablemente siempre llevaré una parte suya dentro de mí que tendrá aprendizajes, emociones, experiencias y sueños que siempre me harán recordar lo que fue mi paso por el Merani. Muchas gracias por todo.




FacebookSíganos en Facebook
FacebookSíganos en Instagram
youtubeSiga el Canal
TwitterEscúchenos en Spotify
TwitterSíganos en Tiktok
TwitterSíganos en X
icaritoVisite Icarito
social
social
social
social
social
social
social